Castellano. (EUROPA PRESS).- Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Castellón han detenido a una pareja que presuntamente obligaba a una mujer a prostituirse y le golpeaba y amenazaba con hechizos si no le daba el dinero que ganaba, según informó la Jefatura Superior de Policía de la Comunitat Valenciana en un comunicado.
Los detenidos, un hombre de 29 años, natural de Gambia, y una mujer nigeriana de 23 años, ambos vecinos de Castellón, están acusados de un delito relativo a la prostitución, inmigración ilegal y asociación ilícita. El pasado mes de marzo, una mujer acudió a las dependencias policiales para pedir ayuda, ya que llevaba varios días oculta entre los naranjos huyendo de unas personas que le obligaban a ejercer de prostituta.
Los agentes pudieron saber, que la mujer fue captada en Nigeria, hace algo más de un año, donde le dijeron que vendría a España a trabajar de prostituta y que, para ello, tenía que pagar 50.000 euros. Tras el acuerdo, y antes de salir de Nigera, fue llevada a una casa de vudú, donde un hechicero le cortó las uñas, el pelo y le quitó la ropa interior, amenazándola con que si se escapaba, no pagaba o avisaba a la policía "el vudú la mataría".
Pasados unos días la joven, provista de documentación falsificada, inició su viaje a España, durante el cual fue acompañada siempre por un miembro de la organización, hasta ser entregada al detenido en Castellón, instalándola en un piso de una céntrica calle de la ciudad. Al día siguiente, le aseguraron que tendría que estar en la calle trabajando de prostituta y que debía pagar cada semana por la casa, la comida y la deuda por haberla traído de Nigeria, por lo que todo el dinero que ganase debía entregarlo.
Asimismo, le hicieron saber, que no podía salir de la casa salvo para trabajar, que si no trabajaba se enterarían y que si no llevaba dinero le pegarían. En el caso de acudir a la Policía, le advirtieron que la matarían. A partir de ese momento, la mujer tenía que llegar al domicilio diariamente al menos con 100 euros para evitar los golpes. En ocasiones permanecía en la calle más de catorce horas para reunir el dinero y evitar que le pegaran. Con el paso del tiempo, las palizas fueron en aumento, para lograr que la víctima incrementase sus ingresos, por lo que tuvo que huir, permaneciendo durante cuatro días escondida en el campo, hasta que tomó la decisión de acudir a la policía.
Pagó 10.000 euros
Tras la investigación policial, los agentes, que averiguaron que la víctima habría pagado a la pareja más de 10.000 euros desde que llegó a España, procedieron a la detención de ambos cónyuges como presuntos autores de un delito relativo a la prostitución, inmigración ilegal y asociación ilícita. En los registros domiciliarios, los policías intervinieron una gran cantidad de documentación, cuadernos, agendas y albaranes de envío de divisas. La investigación policial continua abierta, por lo que no se descartan nuevas detenciones.
Los agentes pudieron saber, que la mujer fue captada en Nigeria, hace algo más de un año, donde le dijeron que vendría a España a trabajar de prostituta y que, para ello, tenía que pagar 50.000 euros. Tras el acuerdo, y antes de salir de Nigera, fue llevada a una casa de vudú, donde un hechicero le cortó las uñas, el pelo y le quitó la ropa interior, amenazándola con que si se escapaba, no pagaba o avisaba a la policía "el vudú la mataría".
Pasados unos días la joven, provista de documentación falsificada, inició su viaje a España, durante el cual fue acompañada siempre por un miembro de la organización, hasta ser entregada al detenido en Castellón, instalándola en un piso de una céntrica calle de la ciudad. Al día siguiente, le aseguraron que tendría que estar en la calle trabajando de prostituta y que debía pagar cada semana por la casa, la comida y la deuda por haberla traído de Nigeria, por lo que todo el dinero que ganase debía entregarlo.
Asimismo, le hicieron saber, que no podía salir de la casa salvo para trabajar, que si no trabajaba se enterarían y que si no llevaba dinero le pegarían. En el caso de acudir a la Policía, le advirtieron que la matarían. A partir de ese momento, la mujer tenía que llegar al domicilio diariamente al menos con 100 euros para evitar los golpes. En ocasiones permanecía en la calle más de catorce horas para reunir el dinero y evitar que le pegaran. Con el paso del tiempo, las palizas fueron en aumento, para lograr que la víctima incrementase sus ingresos, por lo que tuvo que huir, permaneciendo durante cuatro días escondida en el campo, hasta que tomó la decisión de acudir a la policía.
Pagó 10.000 euros
Tras la investigación policial, los agentes, que averiguaron que la víctima habría pagado a la pareja más de 10.000 euros desde que llegó a España, procedieron a la detención de ambos cónyuges como presuntos autores de un delito relativo a la prostitución, inmigración ilegal y asociación ilícita. En los registros domiciliarios, los policías intervinieron una gran cantidad de documentación, cuadernos, agendas y albaranes de envío de divisas. La investigación policial continua abierta, por lo que no se descartan nuevas detenciones.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada